Mía va a cumplir diez años. Es tan grande que ya no necesita papás. Que lo sepan todos. Tampoco necesita a los que van a buscarla hoy al Hogar, aunque esta sea su última oportunidad de crecer en una familia. Porque Mía lo sabe bien: muy pocos papás eligen a chicos grandes. Los prefieren con cachetes más gordos y menos historia encima. Escondida en su casa perfecta, les escribe una carta que se reproduce en este libro.
María Laura Dedé
Editorial Comunicarte
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